"Cuando más se necesita la unidad, cuando empezamos a ver los
resultados concretos en materia de recuperación económica y del empleo
en todos los indicadores disponibles, cuando atravesamos el desafío de
un shock de precios internacionales sobre una inflación ya muy elevada y
sabiendo todo lo que falta para que el vivir cotidiano deje de ser un
padecimiento para muchos compatriotas, el peronismo no puede darse por
vencido en la representación y protección de los intereses, de las
conquistas y de los derechos del campo nacional y popular", planteó el
exjefe de Gabinete. En su artículo, Cafiero repasó que "el pueblo
argentino dejó atrás, con madurez y en paz, el fallido gobierno del
Presidente Mauricio Macri. 99 días más tarde, ese mismo pueblo desplegó
un enorme esfuerzo, patriótico, para atravesar uno de los mayores y más
duros desafíos en generaciones, la pandemia de coronavirus. Sin haber
superado del todo esa escena, aunque ya con la posibilidad de circular
con cierto grado de normalidad como consecuencia del extensivo y
efectivo proceso de vacunación, nuestro país enfrenta -como el mundo
todo- los múltiples efectos, todos ellos negativos, de una guerra en
Europa". Cafiero destacó que el presidente Alberto Fernández y la
vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner "optaron, en cada uno de
esos momentos, por priorizar los intereses del pueblo argentino" y "en
conjunto impulsaron la unidad política para derrotar la experiencia
neoliberal macrista, dispusieron luego las medidas de cuidado de la
salud y de los ingresos que protegieran a todos y cada uno de los
habitantes y a las empresas, evitando el colapso del sistema de salud".
En
relación a la invasión de Rusia a Ucrania, señaló que "en las nuevas
circunstancias que la guerra nos presenta, la coalición de Gobierno
avanza adoptando las acciones necesarias para que el impacto del aumento
de los precios internacionales (en la energía y los alimentos,
fundamentalmente), y la disrupción de la logística de las mercancías, no
afecten la potente recuperación de la producción y el trabajo que se
observa en la Argentina".
"En la Argentina, con su derrotero
particular, el proceso de endeudamiento, producto del modelo de
valorización financiera llevado adelante por el gobierno de Cambiemos,
desembocó en una crisis de balanza de pagos y un retorno al FMI",
sostuvo Cafiero sobre la administración de Macri.
En ese marco,
completó: "A nuestro Gobierno le tocó hacerse cargo de esa realidad. Con
54% de inflación y 35% de pobreza, una caída del PIB per cápita en
torno al 7% y una retracción notoria del consumo y la inversión. Deuda
doméstica 'reperfilada', deuda con bonistas extranjeros impagable y el
préstamo más grande de la historia, no solo de la Argentina, sino del
FMI".
En esa línea, indicó que "el acuerdo con el FMI que esta semana
se trató en el Congreso tiene la intención de generar un tiempo, un
impasse en el cronograma de pagos, para que la Argentina crezca y avance
con la política industrial que ya ha dado buenos resultados pero que,
sin dudas, debemos profundizar para ir aflojando el estrangulamiento de
nuestro sector externo y, al mismo tiempo, dar cuenta de todo lo que
falta para que todas las familias puedan vivir dignamente en nuestro
país".
"Se trata de un acuerdo con el FMI, nada para festejar como
hemos dicho en múltiples ocasiones. Pero se trata también de un acuerdo
que contiene algunas novedades importantes respecto del diagnóstico
sobre los problemas de la economía argentina y de las políticas para su
solución", aclaró.
Al respecto, expresó que "hubiese sido mucho mejor
que nuestro espacio político votara unido" en el Congreso, aunque,
insistió, "estas diferencias en el seno de nuestra coalición bajo ningún
aspecto deben transformarse en una ruptura del espacio político".
Para
Cafiero, "las transformaciones que necesitamos para modificar la
realidad productiva, laboral y social de nuestro país requieren de la
unidad de la coalición, del trabajo y las ideas de todos los compañeros
que constituimos este espacio político".
Cafiero subrayó que "un
momento histórico y global como el que mencioné no puede ver al
peronismo con sus energías puestas en la interna. Necesitamos esas
energías para avanzar con la agenda de la transformación".
"Atravesar
este presente de tensiones internas y externas implica mirar a los ojos
a la sociedad, abandonando los reclamos que unos tengamos sobre otros.
Quienes abrazamos el movimiento político más importante de la Argentina,
e incluso de América Latina, nos sentimos interpelados por la
adversidad y su impacto material y cotidiano sobre el pueblo argentino",
puntualizó.