El ex jefe de Gabinete propone a otros, que ya se están sumando al equipo electoral.
Como
informó este diario, Peña hace tiempo que viene asesorando sotto vocce a
Larreta, lo cual no termina de agradar a quienes rodean al jefe de
Gobierno, en particular a su secretario general y jefe de campaña,
Fernando Straface. A él le adjudican una nota en un gran diario que
expuso el rol de Peña en las elecciones. Curiosamente, a ese artículo le
contestó otro en una tribuna de doctrina en la que Macri dice no tener
acciones: en el segundo, se aclaraba que Peña es solo un asesor externo.
El
intercambio de mensajes y operaciones a través de los medios afines
llevó a Vidal a dar explicaciones a sus aliados. "Habló con los que
tenía que hablar", dicen. Esto es: los aliados radicales -que no lo
pueden ni ver- y los de la Coalición Cívica. En particular, le explicó a
los distintos grupos porteños que el rol de Peña es de asesor externo.
De hecho, entre los colaboradores más directos de Vidal tampoco lo
pueden ver a Peña: tal vez por eso jamás pisó una reunión del comité de
campaña. El ex jefe de Gabinete prefiere hablar alternativamente con
Vidal y con Larreta.
¿En qué la asesora? Según se comenta, Peña viene
dando su opinión sobre la campaña publicitaria y la estrategia de
encuestas y focus groups. Larreta quedó preocupado por el resultado
porteño: si bien ganaron, Javier Milei se llevó 13 por ciento de los
votos y amenaza con llevarse más de ese 11 por ciento que obtuvo Ricardo
López Murphy. En ese contexto -según se comenta- Peña habló pestes de
todo lo que fueron los spots publicitarios y la vía pública que hicieron
para Vidal desde la agencia de publicidad BBDO Argentina de Carlos
Pérez. El ex jefe de Gabinete tampoco tuvo buenas opiniones de los
informes cuantitativos y cualitativos que les acerca a Larreta y Vidal
el secretario de Comunicación, Contenidos y Participación Ciudadana,
Federico Di Benedetto.
En su lugar, Peña presionó para sumar gente
propia: propuso al consultor Pablo Knopoff (Isonomía Consultores) y a
Guillermo Oliveto (W Consultora), para hacer un nuevo trabajo de
encuestas y focus groups. Y finalmente, en estos días, logró que
Straface los sume. De esa puja entre sectores el PRO puede ser que haya
salido la decisión de ponerlo en escena a Peña de forma involuntaria y
esa suerte de intercambio de artículos entre medios afines. Otros en el
PRO estiman que la decisión de exponerlo nuevamente a la luz sale del
propio Peña: "Se está subiendo el precio como consultor, que es a lo que
se dedica ahora", imaginan.
No obstante, entre los colaboradores de
Vidal estiman que será muy difícil que llegue a pisar una sola reunión
del comité electoral. "A Peña le cuesta aparecer porque nadie lo quiere:
ni en el Gobierno porteño, ni en los adláteres de Vidal: n-a-d-i-e",
deletraba un conocedor del PRO y de la ex gobernadora bonaerense. De
hecho, en su libro Primer tiempo, Macri terminó de blanquear que buena
parte de Juntos por el Cambio le exigió desarmar la estructura de
jefatura de Gabinete y echarlo a Peña. "Por suerte pude conservarlo",
apuntó en su libro. Hace poco dijo que es uno de los dirigentes del
futuro. No todos en la alianza opositora comparten esa visión idílica de
quien fue el jefe de Gabinete hasta el último día de su gobierno.En
este tiempo, Peña se dedicó a la consultoría política, a los negocios en
Brasil y mantiene relación con el círculo cercano a Macri, como por
ejemplo con su exsecretario de Asuntos Estratégicos Fulvio Pompeo, con
quien comparten una fundación (Argentina Global). No es lo único que
comparten: Pompeo es uno de los investigados junto a Peña por el
contrabando de armas a Bolivia