La Corte Suprema sentenció por unanimidad en 4 votos que el Gobierno
nacional “violó” la autonomía de la Ciudad de Buenos Aires al definir la
suspensión de las clases presenciales en el distrito. Con un voto
conjunto de los jueces que fueron convencionales constituyentes Juan
Carlos Maqueda y Horacio Rosatti y dos votos separados de Carlos
Rosenkrantz y Ricardo Lorenzetti coincidieron en avalar la demanda de
Horacio Rodríguez Larreta y extendieron los alcances de su decisión más
allá de los DNU del Poder Ejecutivo. Es un duro revés para la Casa
Rosada que, según se desprende del texto del fallo, deberá a futuro
“concertar” decisiones de ese tipo con las autoridades locales, a
futuro.
En lo central, la Corte sostuvo que la Ciudad goza de la
misma atribución que las provincias, de acuerdo a la Constitución, para
regular sobre los modos de asegurar la educación sobre sus habitantes y,
por ende, su modalidad. Pero que además, el Estado Nacional no brindó
los suficientes fundamentos para sostener una potestad sanitaria federal
que le permita legislar sobre esas atribuciones, en lo que hace a las
clases presenciales.