Si se omite del análisis la suba previa a las PASO que infló el Merval
un 9%, la debacle no cambia notoriamente de magnitud. En lo que va del
año, cayeron el Galicia, el Supervielle y el Macro, 65,3%, 73,6% y
50,5%.
Incluso mayores fueron las pérdidas registradas en las
energéticas. Por ejemplo, Edenor se derrumbó 79,8%, Pampa Energía, 61,6%
y Central Puerto, 70,8%. YPF, que en la primera mitad del año tuvo un
buen desempeño, cayó 39,3% desde enero, pero si se toma solamente lo que
perdió desde las PASO, es un desplome del 75%.
Si se observa que
desde que Argentina dejó de ser mercado de frontera el último 29 de
mayo, las pérdidas también son de magnitud. El regreso al índice MSCI
de mercados emergentes no tuvo el efecto esperado: YPF entró al índice
el 16 de julio y desde entocnes perdió 52,7% y sus papeles hoy están en
mínimos históricos, a 8,13 dólares en la bolsa de Nueva York. Es decir
que está a menos que los 10,5 que valía en 2001. Y así lo advirtió esta
noche Alberto Fernández en su cuenta de twitter.