"Ya pedimos una audiencia en Relaciones Laborales para que la empresa
informe por qué no puede pagar de una sola vez. Sabemos que venía
pagando con cierto atraso. Si van a pedir un procedimiento preventivo de
crisis, deberían hacerlo a nivel nacional", explicó Rodrigo Genoni,
subsecretario general del Centro de Empleados de Comercio pampeano,
según publicó El diario de La Pampa. La empresa argumenta que es que se
debe a la crisis que atraviesa el sector.
Los trabajadores de la
cadena recuerdan que Eduardo Costa es el legislador más rico de la
Argentina, según lo que dicen sus declaraciones juradas.
Hace varios
meses que la industria automotriz comenzó a suspender personal, a
General Motors, Renault, Fiat, PSA Argentina y Honda, se suma la fábrica
de camiones Iveco que confirmó la suspensión de 900 operarios en su
planta de la localidad cordobesa de Ferreyra. La planta sólo funcionará
diez días en marzo y la empresa anunció la apertura de un plan de
retiros voluntario.
La mayor empresa de carrocerías el país,
Metalpar, también cerró sus puertas y despidió a 600 empleados. La
histórica Fate, del grupo Madanes, pidió y obtuvo el procedimiento
preventivo de crisis, pese a la oposición del Sindicato Único de
Trabajadores del Neumático Argentino (SUTNA), liderado por Alejandro
Crespo, que le propone a la empresa una mesa de negociación real y
efectiva. Fate busca eliminar un turno completo de producción, lo que
significa el despido de 450 trabajadores. Pero Crespo aseguró que la
mesa de negociación debe servir para buscar acuerdos. "Nunca avalaríamos
despidos", afirmó.
La planta de Siderar, ubicada en el partido de
Morón se encuentra paralizada. Sus trabajadores denuncian algunos
despidos no sólo en la fábrica de Haedo, sino también en la de Ensenada.
Forma parte del grupo Techint que cuenta con 16 plantas, 16.000
empleados y 10.000 clientes en 35 países. Ternium Siderar es el mayor
fabricante de acero de Argentina.
Pero el mal momento se replica en
casi todos los sectores. Hasta el mismísimo grupo Arcor, tiene
problemas. Una de sus marcas, La Campagnola tiene seis plantas, pero la
ubicada en General Pueyrredón está cerrada desde el 24 de diciembre del
año pasado. Allí trabajan 130 empleados que desde las fiestas de fin de
año, sólo cobran el 70% de sus sueldos. El 25 de febrero pasado Arcor
anunció que cerrará un mes más por vacaciones y planea reabrir el 25 de
marzo. La preocupación de los trabajadores está latente porque la planta
permanecerá un total de tres meses sin producir.
La planta de La
Campagnola fabrica latas de conserva de sardinas, atún y todo lo que es
pescado, sumado a salsas. La explicación de Arcor es que tienen
demasiado stock y deben parar por la fuerte caída de las ventas. El
resto de los complejos locales de la compañía, que cuenta con un total
de 37 en Argentina y 10 en el exterior, trabajan a media máquina, entre
un 50 y un 60% en promedio. El grupo emplea a 14.000 trabajadores en la
Argentina. Si bien en algún momento influyó la apertura de la
importación, con el actual valor del dólar es menos lo que ingresa. Hoy,
el problema es la caída de consumo.