Así lo indicó en un comunicado la Asociación Argentina de Empresas de
Juguetes y Afines (Aadeja), presidida Carlos Restaino, en el que se
precisó que "en la actualidad hay, en general, una baja en el consumo
debido a la inflación".
No obstante, según esta entidad, la baja
en el consumo no se ve reflejada en el caso del juguete, dado que los
precios no subieron desde 2014 y para este Día del Niño se espera que el
valor de los regalos se ubique entre los $ 200 y los 500 pesos.
"La
venta de juguetes viene aumentando un 20% anual, porque los precios
están congelados desde hace más de ocho meses, lo que le da una ventaja
frente a otros rubros como el textil o el electrónico", precisó la
asociación sectorial.
Para esta fecha, que todos los años se
celebra el primer domingo de agosto pero que este año se modificó por
las Primarias Abiertas Simultáneas y Obligatorias (Paso), el
comportamiento de las ventas estará representado en un 40% por productos
locales, mientras que el resto tendrá que ver con productos importados.
En
la plana industrial, este sector cuenta con alrededor de 100 empresas
fabricantes de juguetes en la Argentina, y las jugueterías están en su
mayoría en manos de capitales locales que ofrecen ventas en cuotas y con
promociones de bancos y tarjetas. A partir de mayo, se implementó
además el plan SuBeneficio, que permite realizar compras con las
tarjetas Sube obteniendo descuentos.
"Esto despierta gran
entusiasmo en el mercado juguetero nacional, y se espera que la
iniciativa tenga resultados por demás positivos para el Día del Niño",
sostuvo la Asociación.
Hasta inicios de la década de los '90, la
industria local, con 260 empresas, aportaba cerca del 85% de las ventas,
pero durante la Ley de Convertibilidad del gobierno de Carlos Menem, el
ingreso irrestricto de productos a bajo precio provocó el cierre de
unas 200 empresas. Así, la industria local se quedó con apenas el 8% de
las ventas, participación que comenzó a repuntar desde 2004 hasta la
actualidad, que representa el 40%.
Por su parte, la Cámara
Argentina de la Industria del Juguete (Caij) difundió un informe
sectorial donde destaca que en la Argentina son doscientas las fábricas
de juguetes, la mayoría de ellas pymes familiares, que emplean a 5.000
personas de manera directa en una industria que factura 128 millones de
dólares anuales.
La entidad próximamente cumplirá 70 años y está a cargo del empresario Matias Furió.
La
Caij indicó que en el corriente año logró "un objetivo muy importante
para el sector" en defensa de la industria local, que es "la prórroga
hasta el año 2021 del arancel externo común del 35% a las importaciones
de origen chino y del resto de los países extra zona".
La entidad
cuenta con un laboratorio que analiza la composición química de los
juguetes -nacionales e importados- que llegan a los consumidores
cumpliendo las normas Mercosur.
El de la Caij fue el primer
laboratorio acreditado en la Argentina y el segundo en América Latina, y
además es el referente en materia de seguridad del juguete frente a las
autoridades nacionales y extranjeras.
De acuerdo con datos de la
entidad, en lo que va del año la industria del juguete lleva vendido en
unidades un 14% más respecto del primer semestre del año anterior. El
precio de los juguetes aumentaron 15% en forma interanual, encontrándose
por debajo del índice de inflación.
Casi el 50% de los productos
que se venden en el mercado local son argentinos, y las ventas en las
jugueterías han crecido 5% en unidades respecto del primer semestre del
año 2014. El precio promedio de los juguetes vendidos en las jugueterías
varía de $200 a $250.
En cuanto a los valores de las
importaciones, en el 2014 fueron de 104 millones, número similar al
registrado en el año 2013. Hasta el mes de junio de este año las
importaciones ascendieron a 46 millones de dólares, similares al mismo
periodo del año anterior.